Está claro que un colegio es lo que es gracias a las personas que lo forman. Y está claro que nadie es indispensable, pero sí que hay personas que marcan la diferencia.
Este curso decimos adiós a alguien que no solo ha aportado su conocimiento y su profesionalidad, impecable, de ayuda inigualable, sino que también nos ha regalado siempre su tiempo y su dedicación con una sonrisa y una amabilidad y paciencia infinitas.
Hoy estamos seguros de que el centro seguirá adelante con el esfuerzo de otros muchos, pero que nada será lo mismo.
Hoy todos hemos querido demostrar, y nos hemos quedado muy lejos, todo nuestro agradecimiento y cariño.
Queremos desearte toda la suerte del mundo en tu nueva andadura, dejas un hueco muy grande.
Cristina, gracias por enseñarnos y darnos tanto.
Te echaremos de menos, siempre.